Muchos analistas hablan del incremento en los costes logísticos, debido al incremento del consumo online, que implica un aumento en la demanda nacional e internacional y una mejor gestión en la última milla. Sin embargo, esto no debería disociarse del impacto medioambiental que esto supone en un corto espacio de tiempo. Los tiempos han cambiado, y seguimos utilizando los mismos canales de transporte, pero con “mayor intensidad”.
No es buen momento de hacer un replanteamiento y promover un nuevo sistema logístico? Las rutas sinérgicas, los almacenes urbanos de suministro, la robotización de los almacenes, y un largo etcétera, contribuirían a frenar la tendencia inflacionista y a generar una logística más econo-ecologista.